Yevsei, un perro Spaniel blanco y negro, espera pacientemente mientras los niños se reúnen para acariciarlo todos los días como parte de una sesión de terapia canina en el este de Ucrania, donde los perros ayudan a los niños a adaptarse a la vida después de la guerra. Es uno de los 28 canes que se encuentran en un centro de ayuda humanitaria en Zaporiyia, donde los pequeños además dibujan, cantan canciones infantiles y reciben apoyo psicológico.
Queda demostrado que los animales son terapéuticos, ejercen una labor muy importante en multitud de situaciones como en este caso las guerras, pero también en casos de discapacitados (como por ejemplo los perros guía de los ciegos). También acompañan a las fuerzas armadas policías, bomberos, en búsquedas de personas desaparecidas, drogas, etc. En resumen casi en lo que sea mientras estén bien entrenados.
Hay quien lo critica porque dicen que no deberían "trabajar", pero yo estoy segura de que disfrutan con ello, que se lo toman como un juego y sus entrenadores los tratan súper bien.
Gracias a ellos se consiguen muchas cosas, gracias por estar ahí.
Es algo que está muy bien.
ResponderEliminarQue tierno. La verdad es que las mascotas dan mucha compañía!!!
ResponderEliminarVivan los animalitos y la persona que ha escrito esto también
ResponderEliminarLos animales son de gran ayuda y dan mucho cariño
ResponderEliminarVivan los animales son muy buenos y hacen mucha compañia yo quiero mucho a mis mascotas
ResponderEliminarMuy buena reflexión! Estoy de acuerdo con la autora en que los animales que trabajan para diferentes cuerpos u organizaciones disfrutan sus tareas. Creo que son mucho más felices que otros que tienen su vida llena de "ocio". La terapia con animales está demostrada como efectiva en muchas situaciones. Aquí en el CRIS tuvimos la experiencia con Vella, ¿la recordáis?
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